Y pienso que soy cristiano (Brotes de olivo)
(Lc 18, 9-14)

Tengo los ojos abiertos y más que abiertas las manos,
mas no veo las injusticias y pienso que soy cristiano.

Miro con pena a los pobres, doy limosnas todo el año,
sólo doy lo que me sobra y pienso que soy cristiano.

Van los hombres por las calles sin afán y sin trabajo,
lo lamento y nada más y pienso que soy cristiano.

Me reúno con frecuencia con la Biblia entre las manos,
la comento y no la vivo y pienso que soy cristiano.

Sólo pienso en mi familia, en ser decente y honrado,
los demás siempre detrás y pienso que soy cristiano.

Las chabolas no me importan, la miseria no la palpo,
a los ancianos olvido y pienso que soy cristiano.

Mas cuando sienta que el mundo se incomoda por mis actos
y el ocioso se levante y tras Dios vaya buscando...

Cuando en todos deje hambre de cada día ser pasto...
puede que pierda la vida, pero ya seré cristiano.