El sagrario abandonado (Brotes de olivo)
Un pastor y un borriquillo llegan a Palomares. ¿Cómo será la parroquia? ¿Acudirá mucha gente? El sacristán me acompaña y me habla de la iglesia, Los que comulgan son pocos, tan sólo en los casamientos, Al llegar a Palomares no encuentro a ningún chiquillo, Me fui derecho a la iglesia, buscando elevar mi ánimo; Al verlo yo recordé de Judas la gran traición; Gran esfuerzo hube de hacer para quedar largo rato, |