El agua no tiene color Ya no hay razas, ya no hay color, sólo hay trigo, sólo hay amor. Y el mismo sol que vemos tú y yo, es de todos y es de Dios. Cuando un hombre te dé de comer y en sus manos agua de beber, recíbelo, qué importa su piel, te lo da de buena fe. Todos comemos del mismo pan, todos buscamos a Dios. Todos bebemos en un manantial y el agua no tiene color (bis). Cuando el sol se asoma al mar, cuando el hombre empieza a sembrar, te miro a ti, me miras a mí, y bebemos libertad. Y si buscas techo y hogar algún hombre te lo dará; recíbelo, no importa su color, te lo da de corazón. |