Aleluya, el Señor es nuestro Rey (salmo 97)

Aleluya, aleluya. 
El Señor es nuestro Rey. 
Aleluya, aleluya. 
El Señor es nuestro Rey.

Cantad al Señor un cántico nuevo, 
porque ha hecho maravillas: 
su diestra le ha dado la victoria, 
su brazo santo.

El Señor da a conocer su victoria, 
revela a las naciones su justicia: 
se acordó de su misericordia y su fidelidad 
en favor de la casa de Israel.

Los confines de la tierra han contemplado 
la victoria de nuestro Dios. 
Aclamad al Señor, tierra entera; 
gritad, vitoread, tocad.

Tocad la cítara para el Señor, 
suenen los instrumentos: 
con clarines y al son de trompetas 
aclamad al Rey y Señor.

Retumbe el mar y cuanto contiene, 
la tierra y cuantos la habitan; 
aplaudan los ríos, aclamen los montes al Señor 
que llega para regir la tierra.

Regirá el orbe con justicia 
y los pueblos con rectitud.